Carácter del signo de Acuario
Acuario, en el Zodíaco, representa firmeza y extrema confiabilidad. El período es invierno, por lo tanto, temperaturas frías y heladas que endurecen incluso las ideas. Aunque adaptarse a la vida sea difícil, los nacidos bajo este signo están comprometidos con el futuro, representado aquí por la primavera, que pronto florecerá como sus flores.
El perfil de Acuario
Los nacidos bajo el signo de Acuario son de naturaleza libre a los que no les gusta someterse a reglas preestablecidas y al ser un signo de aire están siempre en movimiento y no les gusta la estática de las situaciones.
Su estado de ánimo es extremadamente volátil y alterna fase de ociosidad y pereza con fases de euforia que a menudo le llevan a no terminar nunca lo que empezó para lanzarse a nuevas ideas e iniciativas.
Elemento
El signo de Acuario es un signo que tiene el aire como elemento dominante, lo que lo hace sabio, pero innovador y no siempre atento a las necesidades de quienes lo rodean.
Signo complementario
El signo complementario de Acuario son los nacidos bajo el signo de Cáncer, una pareja a la que es natural estar juntos.
Metal
El metal asociado a este signo es el Zinc y la Plata, oscuros y preciosos como los planetas Saturno y Urano que lo representan.
Color
El color es el azul, que representa cielos despejados y limpios.
Planeta dominante
Los planetas regentes son Saturno y Urano.
Parte del cuerpo
La resistencia física y los problemas neurológicos son los puntos débiles de este signo.
Perfume
Acuario prefiere fragancias casi tan impalpables como el aire.
Frase simbólica
Acuario emprende largos viajes con la mente
Amor y Profesión
Los nacidos bajo este signo se inclinan por los más diversos trabajos, siempre y cuando se sientan libres, sin reglas estrictas que respetar y sin tener el control molesto de los superiores.
Acuario es muy romántico y la mayoría de las veces ingenuo, lo que le lleva a darse cuenta tarde de las situaciones que limitan su libertad. Esta limitación le hace despertar y reevaluar su relación con su pareja. No siempre se dice que rompe el vínculo, pero esto llevaría a la somatización de la obligación derramando sus efectos tanto en el cuerpo como en la mente.